¿Quién nos auxilia en la hora del silencio?
¿A dónde van los ecos de la risa?
¿Dónde se archivan los besos?
Con qué botón se borran las caricias, ¿quién acaricia el recuerdo?
¿Sangro por la herida? Pues bien, sangro.
Hay duelos inevitables, como la muerte.
Hay duelos certeros, como las mentiras.
Y hay duelos que amenazan con ser eternos, como el silencio.
Quizás somos todos seres rotos, Frágiles, Tratando de caminar sosteniendo Nuestros pedazos de humanidad, Con la esperanza de no deshacernos en la marcha, Buscando aquello que nos sostiene En una pieza.
jueves, 9 de agosto de 2018
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